La transformación digital ha expuesto a las empresas a nuevas brechas de seguridad para los ciberataques. Debido a las rápidas mejoras y los constantes cambios en tecnología, esta posibilidad ha crecido de forma exponencial. Las organizaciones deben anticipar y gestionar esta mayor vulnerabilidad.
En el informe “What’s Now and What’s Next” sobre ciberseguridad de la compañía de seguros Aon se identifican ocho grandes ciberriesgos: el mayor uso de la tecnología, la rápida expansión de los datos y la tendencia a confiar en terceros y proveedores de servicios externos o la gestión no segura de los dispositivos del Internet de las cosas.
Tampoco conviene descuidar factores como la mayor conectividad, los propios empleados, la transición tras una fusión o la adquisición de otra empresa, el equilibrio entre las nuevas regulaciones y la evolución de estas amenazas o la falta de un enfoque exigente para preparar y planificar la actuación por parte de la alta dirección.
Vía: Expansión.
Imagen: Correduría de Seguros.